¿Mantiene la pizarra su vigencia?
La
pizarra es un medio de percepción directa. Su presencia es casi sinónimo de
aula o local docente, pues no se concibe la existencia de un aula que no cuente
con una pizarra. En la era moderna, del espacio virtual y la telemática, la
pizarra sigue siendo el medio de enseñanza básico para la presentación de
ideas. Los docentes la emplearán con mayor eficacia en la medida que comprendan
sus características, flexibilidad y oportunidades que nos ofrece para una
óptima instrucción.
La pizarra ha evolucionado
tanto, que en la actualidad ha llegado a adquirir un carácter polifacético,
pues no sólo continúa desempeñando su función clásica, sino que se emplea para
apoyar el desarrollo de los métodos docentes participativos contemporáneos.
Asimismo, la aparición de la pizarra blanca metálica porcelanizada, le permite
hacer las veces de pantalla, soporte para láminas, carteles, símbolos y notas;
asumiendo las funciones de la pizarra magnética, a la vez que el empleo de
plumones especiales de diversos colores, evita el molesto polvo de yeso.
Valor
pedagógico
Entre
los valores pedagógicos esenciales que posee se pueden destacar los siguientes:
- Fuente de imágenes: La utilización de la
pizarra proporciona la más cómoda y abundante fuente de imágenes. Se
consideran que son imágenes "emergentes", que nacen a la vista
de los educandos. Este aspecto es singular por lo que tiene de motivación
como por la fuerza expresiva del propio acto, mucho más elocuente para los
estudiantes que cualquiera de los géneros de explicación. Por eso se
califica la pizarra como la "pantalla mágica", capaz de brindar
un dinámico apoyo gráfico a las variadas y variables situaciones
didácticas.
- Accesibilidad: Cualidad importante de
este medio de enseñanza pues, como se señalara antes, se encuentra en
todos los locales docentes, constituye un punto de convergencia de las
miradas del auditorio y está "tan a mano"; es visible de modo
natural y puede ser empleado en cualquier momento, sin el menor obstáculo y
con la máxima comodidad; todo lo cual le otorga la consideración de ser el
medio de enseñanza accesible por excelencia.
- Activismo: Todo lo que ha de
contener la pizarra se "hace" en el momento. Los materiales
informativos que se exhiben en su superficie son siempre de "
creación". Cuantas tareas desarrollen sobre ella profesores y
estudiantes, constituyen ejercicios que poseen un indudable signo de
actividad.
Tamaño
y ubicación
La
pizarra varía de tamaño en correspondencia con el tamaño del local y capacidad
del auditorio, así como de la cantidad de información que se pretende manejar.
Las hay fijas en la pared y
otras portátiles. Su ubicación más empleada es en el centro anterior del local.
Su altura dependerá de los espectadores, pues su borde inferior debe quedar a
la altura media de los ojos de los educandos sentados. La primera fila de
asientos deberá situarse a una distancia no menor del doble del ancho de la
pizarra y los más alejados no deberán quedar más allá de 6 veces el ancho de la
pizarra. Su mayor área de visibilidad es un ángulo de 90o, cuyo
vértice se localiza en el centro de la pizarra.
Distribución
de la información
La
mejor manera para distribuir la información en la pizarra es dividiéndola
mentalmente en varias partes o zonas iguales. Si se emplea adecuadamente estos
espacios imaginarios, bien estudiados previamente mientras se confecciona el
guión de clases, se logrará trasmitir una información más coherente y
organizada.
Se puede dividir desde 2 hasta
9 zonas imaginarias. Analice algunas situaciones docentes, por ejemplo:
- Imagine que usted necesita hablar de
ventajas y desventajas; en este caso lo lógico es dividir la pizarra en 2
zonas: una a la izquierda para las ventajas y otra a la derecha para las
desventajas.
- Si usted va a abordar 3 tópicos
básicos (antes, ahora y el futuro), entonces divídala en 3 zonas
verticales.
- Si va a abordar 4 elementos
(debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades), entonces se dividirá
mentalmente por la mitad vertical y la mitad horizontal.
- Si va a abordar 6 aspectos en su
exposición, entonces divídala verticalmente en 3 áreas y horizontalmente
en 2.
- Por último, y es lo más frecuente,
si divide la pizarra en 9 zonas (3 verticales y 3 horizontales), la zona
central o 5, es la del " núcleo semántico", la de mayor
visibilidad y fuerza pedagógica, donde se deben colocar las ideas
centrales a presentar. Empleando las restantes zonas, para colocar las
explicaciones complementarias.
Como
puede apreciar, la distribución de la información en la pizarra, no puede ser
espontánea, necesita de un trabajo profesional serio, que se planifica de
antemano cuando confecciona el guión de clases, precisando en qué momento va a
emplear la pizarra, qué se propone con ella y cómo combinar el empleo de este
medio con otros. 1,2
Recomendaciones
¡QUÉ
HACER!
- Escribir los elementos centrales de
una clase: fecha, título y sumario.
- Destacar aspectos importantes de la
clase, discusión grupal u otra forma de enseñanza; presentar esquemas,
dibujos, gráficos, resumir discusiones, dar conclusiones, presentar
cuadros sinópticos o comparativos, entre otros.
- Utilice letra clara y de tamaño
adecuado en correspondencia con el tamaño del local. Se aconseja el empleo
de letra de tipo imprenta, pero utilizando mayúsculas y minúsculas. Deje
el espacio adecuado entre palabras y líneas.
- Respete la línea horizontal y evite
el amontonamiento y caída de las últimas sílabas.
- Utilice tizas o plumones de colores
para dar énfasis a los aspectos principales. Subraye una palabra o frase
para reforzarla. Para indicar movimiento o dirección emplee flechas.
- Cuando termine de escribir sitúese a
un lado de la pizarra para no molestar la visibilidad de los educandos.
- Utilice el puntero para señalar algo
de lo escrito.
- Borre la pizarra cuando termine de
exponer una idea completa, así como cuando termine su clase.
- Cuando borre, hágalo de arriba a
abajo (si utiliza tizas) y evite movimientos circulares, para evitar
levantar el polvo.
¡qué
no debe hacer!
- No hable mientras escribe en la
pizarra, ?no le hable a la pizarra! Hable siempre de frente al auditorio.
- No emplee abreviaturas de palabras,
aunque se esté familiarizado con su significado.
- No escriba lo que es obvio o esté en
los libros y materiales complementarios.
- Nunca borre la pizarra con las manos
o con un papel. No borre tampoco haciendo "huecos" dentro de lo
que está escrito en la pizarra.
Comentario
final
El
uso principal de la pizarra es el de proporcionar información esencial y
facilitar la interpretación y significado de conceptos y "nudos"
claves del aprendizaje. Esto se logra en la medida en que sea capaz de
utilizarla correctamente, lo que a su vez está en función del interés que ponga
el docente, así como en su experiencia y maestría pedagógicas.
Algunos consejos adicionales
se podrían escribir, pero si el profesor pone en práctica estos apuntes, mucho
se lo agradecerán sus educandos.
¡Hasta la próxima!
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
- Salas-Perea RS. Los medios de
enseñanza en la educación en salud. Biblioteca de Medicina, Vol XXIII. La
Paz:Facultad de Medicina,Universidad Mayor de San Andrés, 1998.
- Rosell W. Medios de enseñanza. La
Habana:Editorial Pueblo y Educación,1989.
Recibido:
3 de enero del 2000. Aprobado: 6 de enero del 2000.
Dr. CM Plácido Ardanza
Zulueta. Centro Nacional de Perfeccionamiento Médico. Calle I No. 202 esq.
a Línea. El Vedado. Ciudad de La Habana.